De re Militari: Guerras Napoleónicas

29 enero 1801: España accede en secreto a invadir Portugal, por presión de Napoleón.

13 febrero 1801: España accede a prestar apoyo naval militar a Francia contra Inglaterra.

21 marzo 1801: Acuerdo de Madrid, Napoleón cede el Reino de Etruria a una infanta de España.

24 julio 1801: Nelson, es comandante de la flota británica del Canal de la Mancha.

14 septiembre 1801: Los últimos franceses del Ejército de Oriente abandonan Egipto.

28 noviembre 1802: Wellesley, ascendido a Mayor-General en Madrás, en la India.

23 febrero 1803: Secularización de príncipes alemanes, comienza a disolverse el Sacro Imperio.

marzo 1803: El Consulado decreta la adopción del Sistema Métrico Decimal en Francia.

3 mayo 1803: Francia vende Luisiana a Estados Unidos por 15 millones de dólares.

16 mayo 1803: Nelson, nombrado comandante de la flota inglesa del Mediterráneo.

23 septiembre 1803: Wellesley derrota al Rajá de Berar en la Batalla de Assaye, en La India.

9 octubre 1803: Se cambia el tratado con España, obligada a pagar 6 millones de reales anuales.

29 noviembre 1803: Wellesley vence al Rajá de Berar en la Batalla de Argaum, en La India.

Latas para el Ejército Francés.
En 1795, durante las Guerras de la Revolución, el periódico Le Monde publicó la noticia de un concurso convocado por el gobierno, por el que se premiaría con 12.000 francos a la persona que fuese capaz de presentar algún método por el cual se pudiese conservar comida durante mucho tiempo sin tener que emplear los tradicionales potes de cristal. Napoleón, una vez que ascendió al Consulado, siguió patrocinando este desafío.
El interés de esta convocatoria no es gastronómico, si no militar, pues se pretende emplear el hallazgo del ganador en la logística de los ejércitos, que debían desplazarse durante periodos prolongados por territorios donde podían no encontrar abastecimientos que requisar o robar, práctica tristemente habitual en tiempos de guerra. Los tarros de cristal no eran prácticos pues se rompían con facilidad durante los avatares de las maniobras.
Un cocinero, Nícolás Appert, gana el certamen con su idea de encerrar alimentos como carne o vegetales en recipientes de hojalata en un proceso de esterilización y vacío realizados mediante calor. Esta robustas latas deben abrirse con cuchillos, como las bayonetas que llevan todos los soldados contemporáneos, aunque también pueden abrirse con hachas de zapador... o reventarlos a pedradas.
Durante este año de 1804 Appert instalará su primera fábrica de conservas de vacuno. Sus grandes latas pasarán a ser parte indispensable del equipamiento militar francés; este eficaz método de conservación no será adoptado por los británicos hasta dentro de unos 6 años, pues hasta entonces los soldados franceses lograrán mantenerlo en secreto, de ahí que muchos confundan su fecha de su invención.

18 mayo 1804: Napoleón decreta su propio nombramiento como Emperador de Francia.

Desde hace unos 15 meses, Gran Bretaña y Francia están oficialmente en guerra, aunque el conflicto solo ha transcendido en una serie de enfrentamientos navales sin repercusión alguna, pues la decadente Marina Francesa, en inferioridad contra la pujante Royal Navy, evita cualquier batalla, permaneciendo anclada en sus puertos.

Napoleón decide que la única manera de invertir la situación a su favor consiste en invadir Inglaterra, razonando que por su menor densidad de población opondrá menos resistencia. Sin embargo, para esta enorme operación Francia debería reunir un colosal ejército y construir una gran flota flota de transporte para atravesar el Canal de la Mancha.

Con los 60 millones de francos obtenidos por la venta de Luisiana a Estados Unidos el pasado año, Bonaparte comenzó a reunir en la costa atlántica francesa tropas y buques para la invasión de Gran Bretaña. Tiene previsto reclutar unos 200.000 soldados. Irónicamente, un banco inglés, el Baring Brothers, financió a los norteamericanos la compra del extenso territorio, dinero que ahora los franceses emplean en preparar un ataque contra los británicos.

Los soldados franceses están acampados en Boulogne sur Mer, Montreuil sur Mer y Brujas, mientras la flotilla se amarra en los puertos entre Étaples y Vlissingen. En cada campamento se instala un Cuerpo de Ejército al mando de un general. El mayor y más importante de todos los campamentos y puertos es Boulogne, donde se construyen fuertes, almacenes y más muelles. Además, incluso se realizan pruebas con globos aerostáticos.

Los infantes, jinetes y artilleros de estos campamentos reciben adiestramiento intensivo de los ejercicios descritos en el Reglamento del 1º Agosto de 1791. Dos días a la semana reciben instrucción en la escuela a escala de batallón, aprendiendo desde el manejo de armas a formaciones y despliegues en columnas y líneas. Otros tres días maniobran a escala de división. Los domingos se reservan para grandes y complejos ejercicios tácticos que involucran todas las unidades acampadas. Y dos veces al mes efectúan prácticas de fuego real contra objetivos, muy raras en la época.

Hasta ahora, los reclutas franceses apenas recibían unos meses de adiestramiento en el mejor de los casos, debiendo adquirir la mayoría de su experiencia en combate ya en campaña, sufriendo un elevado número en bajas cuando entraban en acción. Sin embargo esta situación es común en la mayoría de los ejércitos occidentales.

Los soldados de la Armée des Côtes de L'Océan, el Ejército de las Costas del Océano, el primer contingente francés constituido por reclutas excelentemente entrenados, serán el núcleo y la génesis del todas las unidades francesas del período, otorgando a Francia la supremacía en los campos de batalla centroeuropeos durante casi una década.

Por su parte, los británicos confían en la la Royal Navy, que patrulla constantemente el Canal de la Mancha para abortar cualquier intento de desembarco en el mar, pues en tierra, tal y como espera Bonaparte, no podrán reunir más de unos 140.000 soldados, debiendo recurrir a levas de milicianos mal entrenados y peor equipados, aunque los ingenieros ingleses construirán una cadena de 74 fortificaciones en la región en Dover y la franja marítima.

Napoleón inspecciona personalmente sus campamentos con asiduidad. Hoy acude a Boulogne, presentándose en una pomposa ceremonia sobre una tribuna engalanada con gigantescas banderas tricolores entorno a la cual unos 1.300 tamboras tocan "Aux Champs", mientras condecora a varios soldados con la recién creada Legión de Honor. El día 27 partirá hacia Aquisgrán, en una visita oficial a la tumba del Emperador Carlomagno.

Los espías británicos creen que pronto ordenará la invasión, necesitando tan sólo de seis horas para cruzar el Canal, urgiendo al Almirantazgo a extremar la vigilancia del estrecho y realizar alguna acción preventiva inmediata.

23 octubre 1804: Nelson es ascendido a Vicealmirante de la armada británica.

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		Las Guerras Napoleónicas Capítulo VIII De 1801 a 1804 Índice de épocas y temas, todo disponible en esta página: Instauración del Primer Imperio Francés: 1801 a 1804 u Volver a Portada de Guerras Napoleónicas Las Guerras Napoleónicas: Capítulo VIII Instauración del Primer Imperio Francés de 1801 a 1804 1801 enero 1801: El Rifle Baker. Varias unidades selectas de infantería ligera del Ejército Británico, como el 23º Real Regimiento de Fusileros Galeses, comienzan a recibir el nuevo Rifle de Infantería modelo 1800. Hasta ahora los británicos contaban con modelos Jäger comprados a Prusia; aunque lentos, frágiles y caros, demostraron su eficiencia en las Guerras de Independencia Americana y las de la Revolución Francesa por su excelente precisión y alcance. El Board of Ordenance, entidad encargada de los suministros militares, hizo una convocatoria para un rifle estándar genuinamente británico, cuyas pruebas, celebradas en Woolwich el pasado 22 de febrero de 1800, pasó satisfactoriamente el modelo diseñado desde 1798 por Ezequiel Baker, un armero de Whitechapel. Inmediatamente se entregaron muestras a un Cuerpo Experimental de Rifles para probar su manejo y tácticas. El Rifle Baker pesa 4,08 kg. y mide 1,16 m. de los cuales 0,76 m. pertenecen al cañón de ánima rayada con siete estrías y de 1,59 cm de calibre, propio de los pequeños proyectiles de carabina ingleses. La llave de chispa es vulgar, aunque la culata, de madera de Nogal, tiene un cajetín para utillaje de limpieza del cual carecen los fusiles. El arma se complementa con un sable bayoneta de estilo prusiano, de unos 60 cm. La particularidad del Rifle radica en su precisión, debida al rayado del ánima, cuyas estrías imprimen al proyectil un movimiento rotatorio que estabiliza su trayectoria y aumenta su alcance. En cambio en el Fusil de ánima lisa, el arma más común, la bala roza y "rebota" dentro del cañón, haciendo su destino impredecible a distancia y abreviando su vuelo. En manos de soldados expertos, la cadencia de disparo del Rifle Baker es de dos a tres disparos bien apuntados por minuto, mientras que la del Brown Bess, el Fusil de Infantería estándar británico, puede llegar al doble, aunque con menor tiempo de puntería. Lógicamente, estas tasas de fuego decrecen progresivamente por cansancio, pues todas las operaciones de recarga son manuales. Esta diferencia en los tiempos de recarga estriba en que el Rifle emplea balas más pequeñas, a envolver en calepinos, pequeños parches de tela engrasados para encajar con las estrías, y la pólvora debe medirse según la distancia al objetivo, mientras que el Fusil emplea municiones ya cartuchadas; estas se pueden utilizar para los rifles, aumentado su cadencia de disparo a costa de perder precisión, solo de provecho en distancias cortas. Los Rifles, caros y lentos de recarga aunque precisos, son entregados a unidades de soldados adiestrados en puntería, como Cazadores, mientras que los Fusiles, más baratos y de mayor cadencia de disparo, son el equipamiento de la Infantería de Línea. Sus tácticas difieren, pues mientras el Fusilero dispara rápido a la masa enemiga apuntando poco, el Cazador intenta seleccionar más sus blancos para tener más seguridad de abatirlos. El alcance efectivo máximo del Rifle Baker se estima en unos 500 m. pero a esta distancia solo los tiradores de élite pueden impactar en su objetivo, pues se estima que a unos 100 m. la precisión del arma ya disminuye un 66%, por lo cual a rangos superiores quizás influye más la suerte que la destreza. Sin embargo, todos los fusiles existentes pierden casi toda su precisión más allá de esta cota. La táctica de las compañías de Escaramuzadores consiste en avanzar en vanguardia de las líneas su batallón, dispersándose en parejas al acercarse al enemigo, abriendo fuego para causar desconcierto y romper su formación, buscando sobre todo alcanzar a sus oficiales. Los británicos, dotados a partir de ahora con este Rifle, tendrán ventaja sobre los Escaramuzadores franceses, equipados con mosquetes convencionales. Se fabricarán diversas variantes del Rifle Baker, incluyendo una carabina de caballería; hasta 1838, cuando deje de fabricarse, se harán más de 22.000 ejemplares. Es el primer Rifle estándar del Ejército Británico. 15 enero 1801: Armisticio de Treviso entre Francia y Austria 29 enero 1801: España accede en secreto a invadir Portugal, por presión de Napoleón. 9 febrero 1801: Paz de Luneville. 12 febrero 1801: Nelson es transferido al mando del barco Saint George. 13 febrero 1801: España accede a prestar apoyo naval militar a Francia contra Inglaterra. 21 marzo 1801: Acuerdo de Madrid, Napoleón cede el Reino de Etruria a una infanta de España. 23 marzo 1801: Asesinato del Zar Pablo I, le sucede Alejandro. 25 marzo 1801: Nelson es transferido al mando del buque Elephant. 2 abril 1801: Batalla de Copenhague. Cuando Dinamarca rechazó salir de su neutralidad armada e impedir el Bloqueo Continental de Inglaterra, la Royal Navy se movilizó contra la flota danesa para disolver la II Liga Neutral Armada de las potencias del norte. Los daneses tenían 18 naves ancladas en el puerto fortificado de Copenhague, protegido por una batería de 66 grandes cañones y un amplia área de bajíos. La fuerza británica que acude a presentar batalla tenía 18 buques de línea, 7 fragatas y 32 barcos menores, al mando de Sir Hyde Parker y el Vicealmirante Horatio Nelson. Nelson comandó el primer ataque con una docena de naves alrededor de los bajíos, a su encuentro salieron 10 barcos daneses, apoyados por sus baterías de costa. Tres de los buques ingleses encallaron, incluyendo una batería flotante destacada para batir las baterías danesas, y Parker ordenó a Nelson que se retirase, pero este le ignoró: al ser informado de la orden, puso su catalejo en su ojo ciego, diciendo no ver la señal. Los ingleses se lanzaron al ataque ferozmente contra los daneses. En el plazo de dos horas, los marineros de Nelson habían sufrido 1.200 bajas y 6 de sus barcos estaban dañados, pero con sus cañones y fusiles habían liquidado a 2.000 de sus enemigos, hundiéndoles un barco y destrozando el resto; tras abordar sus buques, tomaron a otros tantos prisioneros. Tras la lucha, los británicos incautarían 12 naves como botín. 16 mayo a 6 junio 1801: España Invade Portugal. El 27 de febrero, el rey español Carlos IV declara la guerra a Portugal atendiendo los consejos de su Privado, Godoy, quien en verdad detenta el poder siendo firme partidario de una alianza militar con Francia, enemiga de Inglaterra, con la que España mantiene un conflicto irregular desde hace dos siglos por el dominio del Atlántico. Las relaciones entre los reinos ibéricos no son malas, pero lo que sucede es que Napoleón quiere que Portugal bloquee sus puertos al comercio de Inglaterra, con la que Francia está en guerra, y presiona al gobierno español para que los lusitanos accedan a sus pretensiones, pero estos se niegan por ser antiguos aliados de los británicos. Por el III Tratado de San Ildefonso suscrito el año pasado, España renovó sus concesiones navales a Francia. Actualmente España tampoco está en guerra oficialmente con el rey Jorge III de Inglaterra, aunque si en la práctica, por lo cual Godoy considera que una futura colaboración naval francesa sería decisiva para disuadir a la Royal Navy de continuar sus esporádicas incursiones contra las colonias españoles de América. La armada española es aún muy importante, pero la marina inglesa ha experimentado un gran auge, superándola ya en algunos aspectos. El 16 de mayo, España declara la guerra a Portugal alegando que como amiga del pueblo francés no puede tolerar que comerciase con las Islas Británicas. En la frontera hispano-lusa se aprestan unos 60.000 infantes españoles preparados para la invasión, repartidos entre Galicia, Extremadura y Andalucía. A finales de mes, Godoy encabeza una columna de 30.000 soldados españoles, mal instruidos y pertrechados, cuyo objetivo es llegar a Lisboa. En realidad la operación es una especie de obra teatral para contentar a Bonaparte, pues no se espera apenas resistencia por parte del ejército y la población portuguesa. Los 40.000 soldados lusitanos del general Lofoe, que no cree posible la invasión hasta que sucede, se rinden, huyen o desertan ante el avance de los españoles, siendo su campaña casi un paseo militar, aunque los portugueses presentan alguna oposición en Arronches y Alemtejo, en Elvás hubo un breve sitio. Prácticamente no hay bajas. En Yelbes, unos infantes lusitanos ofrecen a los hispanos un ramo de naranjas en señal de amistad, que va a manos de Godoy, quien los envía a la reina de España como regalo; cuando la noticia se divulga, se llama a esta campaña "La Guerra de las Naranjas." Napoleón desconfía de la determinación de los españoles y envía unos regimientos de infantería al mando del general Leclerc para supervisar la campaña, pero los franceses entran pisoteando tierras de cultivo y son apedreados por campesinos del Ampurdán, debiendo detener su marcha. En Portugal, las tropas españolas pasan por Portoalgre y llegan a Campoamor, donde Godoy considera que ya ha terminado la farsa. Bonaparte empezó a sospecharla y pide a los españoles que no devolviesen los territorios obtenidos. El 6 de junio, España y Portugal firman un tratado de paz en Badajoz, por el que los lusitanos pierden la plaza fuerte de Olivenza y los territorios circundantes. Francia les exige que paguen a los españoles una multa de 15 millones de libras esterlinas y declararse neutrales; los representantes lusos firman por que los hispanos acuerdan no pedirla. Poco después, el Cónsul francés se enterará por sus espías de que toda la invasión ha sido un fraude, pidiendo que se renegocien los tratados de Badajoz. Godoy fingirá estar ofendido por la desconfianza francesa y amenaza con romper su alianza con Francia para pactar otra con Inglaterra. Napoleón se siente burlado, pero necesita la ayuda de la armada española para sus futuros planes contra Inglaterra, y aparenta recobrar su cordialidad. En privado, sueña con invadir la Península Ibérica para destronar sus monarquías e instaurar gobiernos revolucionarios. 3 julio 1801: El Submarino de Fulton. El inventor norteamericano Robert Fulton, desarrolló entre 1793 y 1797 los planos para la construcción de un buque que pudiese navegar sumergido, ofreciéndolo al Directorio para contrarrestar el poder de la Royal Navy. El gobierno acepta subvencionar el proyecto, que no era original, pues en 1620 el anglo-holandés Cornelius Drebbel ya fletó un navío de concepto similar. En 1800 Fulton termina de construir en Rouan su modelo "Nautilus", una estructura estanca de forma ahusada, construida de chapas de cobre sobre un armazón de arcos de acero de unos 6,47 m de eslora por 1,93 m de manga. Sumergido se propulsa por una hélice cuyo eje es movido por la tripulación de 3 hombres; en superficie puede izar un mástil abatible y desplegar una pequeña vela. La quilla está hueca para servir como tanque de lastre y la maniobra se controla con un timón horizontal y una aleta en cada costado. El casco cuenta en su parte superior con una cúpula de observación, y de la proa sobresale un botalón en cuyo extremo porta una "carcasa" o mina, un cilindro de cobre relleno con 5 a 200 libras de pólvora. Su táctica de ataque consistiría en aproximarse sumergido a un buque enemigo y abrirle una brecha bajo la línea de flotación con los explosivos, detonados por una llave de chispa convencional. Fulton realizó la primera inmersión de su navío en un tramo del Sena cercano a Rouan, el 29 de julio de ese año, pero la corriente del río frustró las pruebas. El inventor trasladó el buque al puerto atlántico de Le Havre para realizar pruebas en aguas costeras, más objetivas, pues serían su medio normal de operaciones contra los británicos. Allí el submarino logra recorrer, sumergido, unos 110 metros. Hoy Fulton prueba su modelo en el puerto de Brest, logrando navegar 400 m. a 7 m. de profundidad en unos 7 minutos. El modelo presenta algunas mejoras: un dispositivo de bombeo de aire para unas cuatro horas y un cristal de 4 cm de diámetro en la cúpula de observación. En la demostración se incluye un simulacro de ataque, hundiendo un balandro, convirtiéndose así en el primer submarino militar de la Historia. Sin embargo, cuando le sea presentado en septiembre, Napoleón perderá interés en el proyecto, considerando a Fulton un charlatán. Este emigrará a Gran Bretaña, donde su proyecto tampoco prosperará. 6 y 13 julio 1801: Batallas de Algeciras. El 6 de julio, el almirante británico James Saumarez comanda una flota de 9 buques que derrotan a 4 barcos franceses al mando del almirante Linois, a pesar de que este cuenta con el apoyo de cañones y baterías de costa españolas del puerto de Algeciras. El 12 de julio, otros 5 barcos españoles acuden en ayuda de los franceses, y los ingleses reanudan su ataque. Los británicos capturan un buque y destruyen dos; sufriendo los franceses 2.300 bajas. Los ingleses tienen 138 muertos y 340 heridos. 15 julio 1801: Se firma el Concordato con el Vaticano. 24 julio 1801: Nelson, es comandante de la flota británica del Canal de la Mancha. agosto 1801 El Fusil de Infantería Francesa. Los ejércitos de la República Francesa adoptan el fusil Modelo Año IX de la Revolución (septiembre de 1800 a agosto de 1801 del calendario gregoriano). En realidad es una variante del fusil Modelo 1777 con el que estaba dotado el ejército de la monarquía, y que fue utilizado extensamente por los franceses durante las Guerras de la Revolución. El nuevo fusil pesa 4,5 kg. y mide 1,52 m. de los cuales 1,4 m. pertenecen al cañón de ánima lisa de 1,75 cm. de calibre siguiendo la regla francesa del siglo XVIII de 19 balas por libra de plomo; cada bala esférica pesa unos 24 gr. requiriendo unos 11 gr. de pólvora como propulsor y cebo. El poco peso de la munición facilita su transporte y abastecimiento. La llave de chispa no ha sido cambiada, presentando inconvenientes como la desconfianza bajo una lluvia intensa, la molestia de comprobar regularmente la sujeción y afilado de la piedra o la abertura del oído, el tiempo entre la percusión del gatillo y la deflagración, o el movimiento al dispararla, circunstancias estas dos últimas que dificultan la puntería. La precisión del arma tampoco ha mejorado, por que en realidad en los ejércitos europeos no se exige ninguna pericia al respecto, priorizando el disparo masivo a corta distancia o "Descarga Cerrada" contra unidades a menos de 60 metros, máximo alcance efectivo; su imprecisión crece considerablemente a partir de los 100 metros de distancia. La cadencia de tiro sigue siendo lenta. Un soldado profesional debe dar unos siete pasos antes de disparar empleando un minuto; pero al ser procesos manuales, tienden a retardarse progresivamente. Los infantes de Línea suelen llevar una cartuchera con unos 30 proyectiles envueltos en cartuchos con su dosis medida de pólvora, algunas tropas selectas llevan un par. La bayoneta de cierre de anillo tiene sección triangular y mide 46,5 cm. Como el disparo es tan impreciso se prefería utilizar este arma blanca para resolver los combates, siendo profusamente utilizada en particular en los asaltos a posiciones defensivas, aunque en las batallas campales a veces se busca el choque definitivo ordenando cargas a bayoneta calada. Se trata pues de un arma basta, fabricada con madera, hierro y algunos adornos en bronce; que debe ser barata para encargarse en cantidades; diseñada para resistir muchos maltratos y accionamientos por parte de soldados que deben ser aleccionados fácilmente, tanto en su manejo en enfrentamientos de masas, como en su posterior mantenimiento y limpieza. Este fusil puede causar daños letales, agravados por el desconocimiento médico de la época; servirá para matar a decenas de miles de personas y dejar inválidas a cientos de miles. Será el estándar de las tropas francesas durante todas las Guerras Napoleónicas. 14 septiembre 1801: Los últimos franceses del Ejército de Oriente abandonan Egipto. 1802 1802: Francisco Javier Castaños alcanza el rango de Teniente General. 25 marzo 1802: Paz de Amiens. Delegados de los gobiernos de Inglaterra y Francia firman en la ciudad francesa de Amiens un tratado que complementa la tregua suscrita en octubre de pasado año, zanjando las disputas territoriales surgidas tras la última Guerra Angloespañola, la Campaña de Oriente y parte de la II Guerra de Coalición. El Reino Unido se compromete a devolver El Cabo y las Indias Orientales Holandeses a la República de Batavia, Menorca a España, Egipto al Imperio Otomano y Malta a los Caballeros Hospitalarios. A cambio, España le cederá la estratégica isla de Trinidad y Francia la de Ceilán, además de evacuar Nápoles, los Estados Pontificios y la República Helvética de tropas francesas. Por último, el tratado también contempla un intercambio de prisioneros de guerra. Francia romperá la tregua el próximo año al declarar la guerra a Inglaterra , involucrando a España al obligarla a ratificar su alianza poco después, aunque oficialmente declare ser neutral. Pero los agentes británicos descubrirán el tratado, siendo atacada por Inglaterra al año siguiente. 19 mayo 1802: Creación de la Legión de Honor. Napoleón Bonaparte crea la Legión d'Honneur, condecoración e institución que distinguiría a los soldados que actuasen valerosamente en el campo de batalla, o a quienes presten a Francia un servicio civil ejemplar; junto a ella se podría percibir una pensión. Se trata de una cruz blanca esmaltada, que cuelga de una cinta de seda roja. Bonaparte llevó a veces esta insignia para mostrarla en público. La Legión como institución tenía un hospital para atender a sus miembros. La Legión viene acompañada de una pensión o sobresueldo anual muy apreciado por quienes la reciben, y su cuantía se estipula en función del rango: un soldado cobraría 250 francos, un oficial 1.000, y un oficial de alta graduación, hasta 5.000. El honor que acompaña a la cruz es auténtico: los soldados tienen la obligación de presentar armas al paso de los condecorados en señal de respeto. En algunos cafés franceses no cobran a quienes la lucen y los Gendarmes no piden la documentación a quienes la portan. Más importante para muchos es que la única persona que puede imponerla sea el mismo Napoleón, que lo hace siempre en una solemne ceremonia. Durante las guerras napoleónicas, unos 48.000 hombres obtuvieron la Legión, sólo 1.200 de ellos eran civiles. En 1806 ya habrá 13.000 galardonados, y desde 1807 los soldados aliados de Francia también podrían ser condecorados; en 1814 la Legión de Honor contaba con 25.000 miembros vivos. Las primeras condecoraciones serán impuestas por Napoleón el 16 de agosto de 1804. 2 agosto 1802: Francia se anexiona Elba. 8 agosto 1802: Cónsul Vitalicio de Francia. Tras la exitosa cadena de triunfos alcanzados dentro y fuera de la nación, culminados en la Paz de Amiens, Napoleón Bonaparte, Primer Cónsul de la República, es para los franceses un hombre providencial, el auténtico salvador de la Patria, siendo muy admirado y respetado. En gratitud, el Senado de la República de Francia le nombra hoy Cónsul Vitalicio, aumentado aún más sus atribuciones y prerrogativas, concentrándose desde ahora en su persona la totalidad del poder poder político francés. Será él quien designe a los altos funcionarios del estado: consejeros, senadores, tribunados y legisladores. Pero con esta decisión la República emprende el camino de una dictadura, pues el sufragio universal se sustituirá por el voto censitario, y sólo al Cónsul se le permitirá legislar; sus decisiones no serán vetadas por ninguna institución, como el Senado, el Tribunado o el Cuerpo Legislativo; los fines de la Revolución Francesa se pervierten. 2 septiembre 1802: Francia se anexiona el Piamonte. 15 octubre 1802: Tropas francesas ocupan Suiza. 28 noviembre 1802: Wellesley, ascendido a Mayor-General en Madrás, en la India. 1803 1803: Los Cuerpos de Ejército. Napoleón desarrolla entre 1800 y 1803 una nueva unidad militar: el Corps d'Armée, su más importante contribución a la organización estratégica, aunque el concepto ya fuese enunciado y aplicado por el mariscal Broglie en 1761, durante la Guerra de los Siete Años. Los Cuerpos de Ejército serán comandados por un Mariscal, agrupando de 2 a 4 divisiones, es decir, de 20.000 a 40.000 soldados apoyados por entre 60 y 120 cañones. Gracias a esta innovación, los Ejércitos franceses, que actualmente cuentan con unos 400.000 hombres, podrán desconcentrarse incrementado su flexibilidad de maniobra, al aumentar sus zonas de control, y disfrutarán de ventajas logísticas, pudiendo abastecerse sobre el terreno con mayor facilidad, al ser unidades más reducidas. También agilizarán su capacidad de respuesta táctica al avanzar los Cuerpos separados, marchando cada uno desplegado en unidades de jinetes exploradores, vanguardia, flancos y reserva, que podrán reagrupare con celeridad cuando alguno contacte con el enemigo. Este tipo de unidades entrará por primera vez en combate en 1805 y por su éxito serán emuladas por los demás ejércitos europeos progresivamente. 19 febrero 1803: El Acta de Mediación Suiza. La Confederación Suiza era un cúmulo de pequeños condados y ducados del Sacro Imperio Romano Germánico, aunque los nobles de Berna, Soleura, Friburgo y Lucerna gobernaban sus feudos cantonales con independencia. Durante la Edad Moderna los campesinos se rebelaron varias ocasiones, siendo duramente reprimidos. Francia anexionó parte del Obispado de Basilea a inicios de la Guerra de la I Coalición, en 1793, y más tarde, en 1797, la región de la Valtelina fue incorporada a la República Cisalpina, un estado satélite francés. A pesar de ello, muchos suizos simpatizaban con los revolucionarios por el común odio que sentían hacia la nobleza. Enardecidos por el triunfo la Revolución Francesa, los Suizos se alzaron una vez más contra sus señores en 1798. Quemaron algunos castillos, pero los nobles de Berna lograron contenerles. Sus líderes, Peter Ochs y César de La Harpe, suplicaron ayuda a la República de Francia, que podría así expandir su área de influencia. Las veteranas tropas francesas invadieron los cantones antes de que pudieran agrupar su ejército confederal. Tan solo el cantón de Berna pudo reunir un contingente, que fue vencido en la Batalla de Grauholz. La República Helvética fue instaurada así por Peter Ochs aquel mismo año, siguiendo el modelo francés de estado centralizado e ideario revolucionario. Las tropas francesas se quedaron, expulsando al resto de la nobleza y reprimiendo las revueltas de campesinos contrarrevolucionarios en Nidwalden, Glarus y Schwyz. Los republicanos suizos promulgaron una Constitución, leyes y realizaron profundos cambios, como la unificación de la moneda, que pasó a ser desde entonces el Franco Suizo. Pero la población se escindió entre partidarios del federalismo y el centralismo, degenerando las reformas en conflictos políticos y civiles. Al año siguiente el país se convirtió en un campo de batalla de la Guerra de la II Coalición, en cual Franceses se enfrentaron a Austriacos y Rusos. Los soldados vivían a costa de saquear el territorio, hundiendo a los granjeros suizos en la miseria y el caos; sumiéndose la República en una Guerra Civil. Las guarniciones francesas que apoyan a la República vencen a los Grisones en 1801, pero se retiran en 1802 en virtud de la Paz de Amiens, reanudándose la Guerra Civil en la cual el gobierno colapsa en menos de cuatro meses. Los Suizos vuelven a suplicar ayuda a Francia, ya con Bonaparte como Cónsul Vitalicio. Napoleón, que ordenó la retirada de sus tropas esperando esto, interviene como "mediador" en el conflicto suizo promulgando hoy su "Acta de Mediación", restaurando la Confederación Helvética, otorgando el carácter jurídico de estado cantonal a Argovia, los Grisones, San Gall, Turgovia, el Tesino y Vaud. Sin embargo, el nacionalismo le costará a la confederación de 19 cantones suizos unos 18.000 reclutas anuales que deberán ceder a los ejércitos de Francia, aunque la cifra se irá reduciendo paulatinamente. 23 febrero 1803: Secularización de príncipes alemanes, comienza a disolverse el Sacro Imperio. marzo 1803: El Consulado decreta la adopción del Sistema Métrico Decimal en Francia. 3 mayo 1803: Francia vende Luisiana a Estados Unidos por 15 millones de dólares. 16 mayo 1803: Gran Bretaña declara la guerra a Francia. 16 mayo 1803: Nelson, nombrado comandante de la flota inglesa del Mediterráneo. 18 mayo 1803: Nelson es destinado al mando del navío Víctory. 1 junio 1803: Tropas francesas ocupan Hannover, aliada de Inglaterra. 23 septiembre 1803: Wellesley derrota al Rajá de Berar en la Batalla de Assaye, en La India. 9 octubre 1803: Se cambia el tratado con España, obligada a pagar 6 millones de reales anuales. 28 noviembre 1803: Independencia de Haití. Napoleón planeaba mantener un imperio colonial francés en América; con este fin compró en 1800 la Louissiana a España, y en 1802 envío al general Leclerc al Caribe al mando de 50.000 soldados con la misión de realizar una campaña para someter a los cimarrones o esclavos liberados de Haití, gran productora del café, apreciadísimo en Europa. Leclerc decidió amedrentar a los negros y mulatos mostrando su ejército, prometiéndoles respetar su libertad si continuaban trabajando en las plantaciones. Pero Louverture, líder de los cimarrones, es detenido y llevado a Francia, donde muere en cautiverio, además los franceses esclavizan a los cimarrones de la Guadalupe, y los haitianos temen por su libertad. Los haitianos se sublevan liderados por Dessalines, que une a los negros y mulatos logrando derrotar al contingente francés, que diezmado por la Fiebre Amarilla se rinde hoy, truncando el sueño del Cónsul francés. Cuando Napoleón sea informado de la desastrosa expedición caribeña, se limitará a decir lacónicamente: "-Malditas colonias... Maldito café." Bonaparte considera la opción de vender la Louissiana a los norteamericanos. Los haitianos serán los únicos esclavos de la historia que logren independizarse mediante una rebelión, y Haití es también el primer territorio de América Latina que se independiza. 29 noviembre 1803: Wellesley vence al Rajá de Berar en la Batalla de Argaum, en La India. 1804 enero 1804: Latas para el Ejército Francés. En 1795, durante las Guerras de la Revolución, el periódico Le Monde publicó la noticia de un concurso convocado por el gobierno, por el que se premiaría con 12.000 francos a la persona que fuese capaz de presentar algún método por el cual se pudiese conservar comida durante mucho tiempo sin tener que emplear los tradicionales potes de cristal. Napoleón, una vez que ascendió al Consulado, siguió patrocinando este desafío. El interés de esta convocatoria no es gastronómico, si no militar, pues se pretende emplear el hallazgo del ganador en la logística de los ejércitos, que debían desplazarse durante periodos prolongados por territorios donde podían no encontrar abastecimientos que requisar o robar, práctica tristemente habitual en tiempos de guerra. Los tarros de cristal no eran prácticos pues se rompían con facilidad durante los avatares de las maniobras. Un cocinero, Nícolás Appert, gana el certamen con su idea de encerrar alimentos como carne o vegetales en recipientes de hojalata en un proceso de esterilización y vacío realizados mediante calor. Esta robustas latas deben abrirse con cuchillos, como las bayonetas que llevan todos los soldados contemporáneos, aunque también pueden abrirse con hachas de zapador... o reventarlos a pedradas. Durante este año de 1804 Appert instalará su primera fábrica de conservas de vacuno. Sus grandes latas pasarán a ser parte indispensable del equipamiento militar francés; este eficaz método de conservación no será adoptado por los británicos hasta dentro de unos 6 años, pues hasta entonces los soldados franceses lograrán mantenerlo en secreto, de ahí que muchos confundan su fecha de su invención. 13 febrero 1804: Se descubre la conjura de Cadoudal contra Bonaparte. 19 y 28 febrero 1804: Detenciones de los generales Moreau y Pichegru . 14 a 21 marzo 1804: Secuestro y Ejecución del Duque de Enghien, El Cónsul Vitalicio Napoleón acusa a Henri de Borbon Condé, Duque de Enghien, de ser el instigador de la conjura que se descubrió recientemente y cuyos cabecillas, los generales Moreau y Pichegru, fueron ya detenidos. El 14 de marzo, un destacamento de Dragones franceses al mando del general Ordiner atraviesa la frontera de Baden sin permiso, raptando al Duque de Enghien de su residencia en Ettenheim, para llevárselo a Francia, encerrándole en el sombrío Chateu de Vincennes. El noble Borbón será sometido a un Consejo de Guerra sumarísimo, sin ninguna garantía judicial, en el que se le acusa de traición. Su sentencia estaba ya determinada de antemano por el Cónsul, siendo fusilado la madrugada del 21 de marzo. Napoleón culpará públicamente al Duque de tramar complots antirrevolucionarios e involucionistas, inculcando a la ciudadanía francesa la idea de que le necesitan más que nunca para salvaguardar a la República de sus muchos enemigos internos y externos, advirtiendo con este ejemplo que está dispuesto a ejecutarles sin compasión. En realidad, el Duque de Enghien era sucesor al trono de Francia por línea directa tras el asesinato de la los reyes durante la Revolución Francesa, y lo que pretendía Bonaparte era eliminarlo para que nadie estorbase su carrera hacia un poder más absoluto del que actualmente posee. Su desmedida ambición le hace soñar con ostentar un título de rey o de Emperador, pretendiendo emular a Carlomagno o Julio César. Los pormenores de este suceso serán conocidos por los monarcas europeos, comenzando a recelar aún más de las intenciones del Cónsul Vitalicio francés. Dentro de unos dos meses, el 18 de mayo, Napoleón emitirá un decreto nombrándose Emperador de Francia. 24 marzo 1804: Napoleón instaura el Código Civil. Un grupo de cuatro juristas franceses a cuyas reuniones asistió el propio Bonaparte para intervenir activamente, termina hoy, tras cuatro años de trabajo, de elaborar una nueva ley civil en forma de código, fundamentada en el derecho romano, articulada y por materias, revolucionando así la técnica jurídica europea, donde la legislación se presentaba hasta hoy en forma de recopilaciones de leyes. Fija aspectos tales como la igualdad de los ciudadanos ante la ley, la propiedad privada, la desaparición de los gremios, la separación de la Iglesia y el Estado o la abolición de los privilegios nobiliarios, eliminado así todos los vestigios del Antiguo Régimen. Así Napoleón revela otra faceta innovadora aparte de la militar; la jurídica. Este código será ejemplo de otros muchos. 18 mayo 1804: Napoleón decreta su propio nombramiento como Emperador de Francia. 19 mayo 1804: Los Mariscales de Francia. Napoleón recupera el antiguo máximo rango militar que se concedía tradicionalmente en el Ejército Francés, pero con el título de Mariscal del Imperio. En tiempos de la monarquía, este cargo era una más bien un título civil honorífico, pero Bonaparte pretende darle un valor militar práctico. Podrán ascender al mariscalato aquellos generales de división que demuestren grandes dotes de organización, así como una lealtad incondicional al Imperio. Los mariscales estarán al mando de Cuerpos de Ejército, agrupaciones de varias divisiones, y durante las maniobras o batallas podrán tomar sus propias decisiones tácticas en el marco de las estrategias dictadas por el Emperador y su Estado Mayor. El Mariscalato se crea hoy con 18 mariscales, cuyos apellidos por los que serán conocidos y períodos de servicio se indican a continuación: Augereau; de 1804 a 1815; Bernadotte; de 1804 a 1809; Berthier, de 1804 a 1815; Bessières, de 1804 a 1813; Brune; de 1804 a 1815; Davout; de 1804 a 1815; Jourdan; de 1804 a 1815; Kellerman; de 1804 a 1815; Lannes; de 1804 a 1809; Lefebvre; de 1804 a 1815; Massena; de 1804 a 1815; Moncey; de 1804 a 1815; Mortier; de 1804 a 1815; Ney; de 1804 a 1815; Murat; de 1804 a 1815; Pérignon; de 1804 a 1815; Sérurier; de 1804 a 1815; y Soult; de 1804 a 1815. Los miembros del Mariscalato aumentarán con el transcurso del tiempo: Víctor, de 1807 a 1815; Macdonald, de 1807 a 1815; Marmont, de 1807 a 1815; Oudinot, de 1809 a 1815; Suchet, de 1811 a 1815; Saint Cyr, de 1812 a 1815; Poniatowski, en 1813; y Grouchy, en 1815 Muchos de ellos servirán en el ejército en campaña, pero otros permanecerán en altos puestos del gobierno durante gran parte de su carrera, como Saint Cyr y Moncey. Los mariscales que participen en acciones destacadas serán premiados por el Emperador con dignidades nobiliarias como ducados o principados, títulos acompañados de privilegios honoríficos y sustanciosas rentas económicas: serán la nueva aristocracia del Imperio. A continuación se exponen algunos de los títulos que conseguirán: Murat, Rey de Nápoles, Príncipe del Imperio, Gran Duque de Cléves y Berg, Berthier, Príncipe de Neuchâtel y Wagram, Duque de Valengin, Davout, Príncipe de Eckmuhl y Duque de Auerstadt, Massena, Príncipe de Essling y Duque de Rívoli, Ney, Príncipe de Moscova y Duque de Elchingen; Bernadotte, Príncipe de Ponte Corvo. Augerau, Duque de Castiglione, Bessières, Duque de Istria, Mortier, Duque de Tréveris, Kellerman, Duque de Valmy, Lannes, Duque de Montebello, Moncey; Duque de Conégliano, Lefebvre, Duque de Dantzig, Soult, Duque de Dalmacia, Suchet, Duque de Albufera, Víctor, Duque de Belluno, MacDonald, Duque de Tarento, Oudinot, Duque de Reggio, Marmont, Duque de Ragusa. Bernadotte llegaría a ser Rey de Suecia por otras circunstancias, Poniatowsky es Príncipe de Varsovia antes de servir en el ejército francés, Pérignon y Saint Cyr son marqueses, Jourdan y Brune son condes. A diferencia de lo que ocurría en el Antiguo Régimen, en el Imperio todo soldado podrá ascender en el escalafón según su valía, por méritos adquiridos en actos de servicio. Muchos de los mariscales proceden de los activos Ejércitos de Italia y el Rin, procediendo de extracción social muy variada. Como dirá Napoleón al respecto: "Todo soldado lleva en su mochila el bastón de Mariscal." 19 mayo 1804: La Guardia Imperial. El 3 de enero de 1800, el Consulado decreta la creación de la Guardia Consular, un cuerpo de soldados de élite para salvaguardia del Jefe del Estado, el Cónsul Napoleón Bonaparte. Tras su proclamación como Emperador, esta unidad pasa a denominarse Guardia Imperial. Los Guardias deben haber participado en tres campañas o tener tres años de experiencia en combate, haber sido heridos en acto de servicio o poseer un historial de probada valentía, y ser patriotas franceses de buena conducta. Como requisitos físicos se les exige estar sanos para luchar, ser menores de 25 años de edad y tener una estatura superior a 1,78 m. De todos los requisitos, el más restrictivo es la estatura, formidable para la época: muchos suelen hacer trampas, como colocarse barajas debajo de los pies para aumentar su talla. Estas estrictas condiciones se mantendrán hasta 1806, cuando se amplía la edad hasta los 35 años y se rebaja la estatura de los Cazadores a 1,72, pero se piden 10 años de experiencia. Desde 1813 se exigen 12 años de experiencia a los oficiales. En 1815 se exigirán 20 años de servicio para formar parte de las mejores unidades, las de la Vieja Guardia. Napoleón refuerza progresivamente la Guardia con nuevas unidades hasta reunir 47.000 soldados en junio de 1812 y 49.000 soldados en octubre de 1813, un 33% de la masa de maniobra de la Grande Armée. La artillería de la Guardia tendrá 96 cañones en mayo de 1811 y llegará a poseer hasta 196 piezas en abril 1813. A continuación se indica la cronología de todas las unidades de la Guardia Consular y de la Guardia Imperial, desde 1799 hasta 1814. 1º Regimiento de Cazadores, diciembre de 1799, 1º Regimiento de Granaderos, diciembre de 1799, 1º Regimiento de Cazadores a Caballo, diciembre de 1799, 1º Regimiento de Granaderos a Caballo diciembre de 1799, Artillería Ligera diciembre de 1799 ( batería de ocho cañones, en aumento desde 1802 ) Escuadrón de Mamelucos, octubre 1801 ( sirve en campaña en 1799 ) Tren de Artillería, septiembre 1800, Escuadrón de Gendarmes, 1801 ( Gendarmes de Élite desde marzo 1802 ), 1ª Compañía de Veteranos, julio 1801, Regimiento de Artillería Ligera, 1803 ( Regimiento de Artillería a Caballo desde 1806 ), Batallón de Marines, 17 septiembre 1803. Velites Granaderos y Cazadores, julio 1804, Velites Granaderos y Cazadores a Caballo, julio 1805, Artillería Velite, abril 1806, Regimiento de Dragones, abril 1806 ( Dragones de la Emperatriz desde 1807 ), 2º Regimiento de Cazadores y 2º de Granaderos, abril 1806, Obreros de Administración, abril 1806, Compañías de Gendarmes d'Ordonnance, septiembre 1806 ( disueltos en 1807 ), Regimiento de Fusileros Cazadores, octubre 1806, Regimiento de Fusileros Granaderos, diciembre 1806, 2ª Compañía de Veteranos, julio 1807, 1º Regimiento de Caballería Ligera Polaca, marzo 1807 ( 1º Regimiento de Lanceros desde 1809 ) Regimiento de artillería a pie, 1808 ( se suman compañías de artillería desde 1809 ), Velites Italianos, abril 1809, Regimientos de Tiradores Granaderos, abril 1809 ( 1º y 2º de Tiradores desde 1810 ), Regimientos de Tiradores Cazadores, abril 1809 ( 1º y 2º de Voltigeurs desde 1810 ), Regimientos de Reclutas Granaderos, marzo 1809 ( 3º y 4º de Tiradores desde 1811 ), Regimientos de Reclutas Cazadores, marzo 1809 ( 3º y 4º de Voltigeurs desde 1811 ), Regimiento de Lanceros de Berg, diciembre 1809. Regimiento de Guardia Nacional de la Guardia, enero 1810, Compañía de Zapadores, julio 1810, 3º Regimiento de Granaderos Holandeses. septiembre 1810, Regimiento de Lanceros Holandeses, septiembre 1810 ( 2º de Lanceros o Lanceros Rojos ). 3º Regimiento de Cazadores y 3º de Granaderos, mayo 1811. 5º y 6º Regimientos de Voltigeurs, mayo 1811, 5º y 6º Regimientos de Tiradores, mayo y agosto 1811 Compañía de Obreros, 1811 ( más tarde Compañía de Trenes de suministros y equipajes ), Flanqueadores Cazadores, septiembre 1811, Compañía de Artillería Veterana, enero 1812, Escuadrón de Tártaros Lituanos, 1812, 3º Regimiento de Lanceros Lituanos, julio 1812. 7º Regimientos de Tiradores y 7º Voltigeurs, 8 marzo 1813. ( los 14º y 15º regimientos de la Guardia del rey José de España ), Tres Regimientos de Eclaireurs, diciembre 1813 ( Granaderos, Dragones y Lanceros ), Cuatro Regimientos de Guardias de Honor, abril 1813 ( de escaso valor militar) Batallón de Granaderos Polacos, octubre 1813 ( con infantes de la Legión del Vístula ). La Guardia tiene privilegios dentro de la Armée. Solo se cuadra ante Napoleón, presentando armas y tocando música; ante los demás mariscales sus hombres sólo saludan. En cambio todos los soldados franceses deben ponerse firmes a su paso, incluso durante las marchas; esto se debe en parte a que los rangos de la Guardia equivalen al siguiente superior de las tropas de Línea, así por ejemplo, los infantes rasos de la Guardia equivalen a cabos de Línea. El salario de los soldados depende de su rango y del tiempo de servicio. Un sargento de la Guardia puede ganar unos 810 francos al año aproximadamente, casi el cuádruple que uno de Línea. De las pagas se deducen cantidades para la comida y el uniforme, que en el caso de un Húsar puede costar 3.000 francos. Las recompensas y pensiones son un 50% superiores a las percibidas por las tropas de Línea. Además, los Guardias disponen de excelentes barracones de los acuartelamientos o los mejores alojamientos que se puedan conseguir en campaña: limpios, cómodos y ventilados; en algunas ocasiones el propio Bonaparte inspecciona aspectos como la longitud de las camas o la calidad de la comida, donde nunca falta el pan blanco. Los Guardias se costean cocineras, pajes, candiles... Sus caballos son igualmente bien alimentados y estabulados. El gran doctor Dominque Jean Larrey es el Cirujano Mayor de la Guardia Imperial, una de las grandes figuras de la historia de la sanidad militar, que organizó un sistema de evacuación y tratamiento de heridos que cuenta con ambulancias y quirófanos móviles, aunque la ignorancia médica de la época limite su atención. El primer hospital de la Guardia está en Gross Caillou. El equipamiento de la Guardia será siempre el mejor que se pueda fabricar en serie y se pueda costear, llegando a disponer de una red de proveedores de muy alta calidad. Varía según las unidades, pero existen ciertos estándares comunes. A veces suelen ser similares a los equipos de las tropas de Línea, pero con acabados mucho más elaborados y ornados. Cada infante de la Guardia lleva un fusil modelo Año IX, que mide 1,52 m, con un calibre de 1,75 cm. y 4,5 kg. de peso, con su bayoneta de aro y sección triangular, de 46 cm., y dos cartucheras de cuero negro con 30 disparos. Algunas unidades llevan un mosquetón de 1,11 m. La espada común es, inicialmente, el sable corto de estilo Briquet, modelo Año IX. La mochila de piel de ternera curtida con dos correajes de ante se atiene a la normativa del Año X, aunque en 1806 se añaden tres correas más. Es pequeña, llenándose con 2 paquetes de cartuchos, bizcocho para 4 días, pantalones y polainas de repuesto, gorra de noche, cepillo de calzado, blanquizal y algunos enseres personales, pesando entre 15 y 20 kg. Los infantes llevan sujeta a ella un plato de metal, una marmita y un gorro, chacó o casco de repuesto, según requiera su unidad. También llevarán otros artículos útiles aunque no reglamentarios, como una cantimplora o botella, "salchichas" de paño para llevar harina, o carteras de lona terciadas sobre un hombro. Los jinetes de caballería portan el sable estándar modelo Año XI, curvo y de 88 cm. de longitud. Los Dragones usan el modelo Año IX, similar al de los oficiales de infantería, con filo de 103 cm. y una carabina modelo Año XIII de 1,41 m y 4,3 kg. La caballería llevará la pistola modelo año XIII, de 35 cm. Los caballos son muy bien tratados, recibiendo al día una ración de 6,5 kg. de forraje o heno, 5 kg. de paja y 8.5 litros de avena. En 1812 se establecerán las tres categorías elementales de tropa de la Guardia, según su grado de destreza, veteranía y especialización, que se especifican a continuación: La Joven Guardia: tropas de los regimientos de Voltigeurs, Tiradores, Flanqueadores y de la Guardia Nacional de la Guardia; parte de la artillería de la Joven Guardia, personal de los Trenes de Suministros y Equipajes. La Guardia Media: parte de los 2º y 3º Regimientos de Granaderos y 2º Regimiento de Cazadores; tropa y parte de los oficiales del 2º Regimiento de Lanceros, Fusileros, Velites, parte del Tren de artillería, Obreros. La Vieja Guardia: 1º Regimiento de Granaderos, parte de los 2º y 3º Regimientos de Granaderos, 1º Regimientos de Cazadores, 1º Regimiento de Cazadores a Caballo, Dragones, 1º Regimiento de Lanceros, Mamelucos, Gendarmes, Marines, Zapadores, Veteranos, Artillería de la Vieja Guardia; los Fusileros y parte de la Artillería de la Joven Guardia, parte de los oficiales del 2º Regimiento de Lanceros, parte del Tren de Artillería; oficiales de los Voltigeurs, Tiradores y Flanqueadores y la Guardia Nacional de la Guardia. Las distintas armas de la Guardia estarán comandadas por 4 mariscales; inicialmente Davout tendrá a su cargo de los Granaderos, Soult, a los Cazadores, Bessiéres a la caballería y Mortier a la artillería y los Marines. Estas jefaturas irán cambiando con el transcurso del tiempo; por ejemplo Murat comandará la caballería imperial en muchas campañas. 16 agosto 1804: El Ejército de Costas del Océano. Desde hace unos 15 meses, Gran Bretaña y Francia están oficialmente en guerra, aunque el conflicto solo ha transcendido en una serie de enfrentamientos navales sin repercusión alguna, pues la decadente Marina Francesa, en inferioridad contra la pujante Royal Navy, evita cualquier batalla, permaneciendo anclada en sus puertos. Napoleón decide que la única manera de invertir la situación a su favor consiste en invadir Inglaterra, razonando que por su menor densidad de población opondrá menos resistencia. Sin embargo, para esta enorme operación Francia debería reunir un colosal ejército y construir una gran flota flota de transporte para atravesar el Canal de la Mancha. Con los 60 millones de francos obtenidos por la venta de Luisiana a Estados Unidos el pasado año, Bonaparte comenzó a reunir en la costa atlántica francesa tropas y buques para la invasión de Gran Bretaña. Tiene previsto reclutar unos 200.000 soldados. Irónicamente, un banco inglés, el Baring Brothers, financió a los norteamericanos la compra del extenso territorio, dinero que ahora los franceses emplean en preparar un ataque contra los británicos. Los soldados franceses están acampados en Boulogne sur Mer, Montreuil sur Mer y Brujas, mientras la flotilla se amarra en los puertos entre Étaples y Vlissingen. En cada campamento se instala un Cuerpo de Ejército al mando de un general. El mayor y más importante de todos los campamentos y puertos es Boulogne, donde se construyen fuertes, almacenes y más muelles. Además, incluso se realizan pruebas con globos aerostáticos. Los infantes, jinetes y artilleros de estos campamentos reciben adiestramiento intensivo de los ejercicios descritos en el Reglamento del 1º Agosto de 1791. Dos días a la semana reciben instrucción en la escuela a escala de batallón, aprendiendo desde el manejo de armas a formaciones y despliegues en columnas y líneas. Otros tres días maniobran a escala de división. Los domingos se reservan para grandes y complejos ejercicios tácticos que involucran todas las unidades acampadas. Y dos veces al mes efectúan prácticas de fuego real contra objetivos, muy raras en la época. Hasta ahora, los reclutas franceses apenas recibían unos meses de adiestramiento en el mejor de los casos, debiendo adquirir la mayoría de su experiencia en combate ya en campaña, sufriendo un elevado número en bajas cuando entraban en acción. Sin embargo esta situación es común en la mayoría de los ejércitos occidentales. Los soldados de la Armée des Côtes de L'Océan, el Ejército de las Costas del Océano, el primer contingente francés constituido por reclutas excelentemente entrenados, serán el núcleo y la génesis del todas las unidades francesas del período, otorgando a Francia la supremacía en los campos de batalla centroeuropeos durante casi una década. Por su parte, los británicos confían en la la Royal Navy, que patrulla constantemente el Canal de la Mancha para abortar cualquier intento de desembarco en el mar, pues en tierra, tal y como espera Bonaparte, no podrán reunir más de unos 140.000 soldados, debiendo recurrir a levas de milicianos mal entrenados y peor equipados, aunque los ingenieros ingleses construirán una cadena de 74 fortificaciones en la región en Dover y la franja marítima. Napoleón inspecciona personalmente sus campamentos con asiduidad. Hoy acude a Boulogne, presentándose en una pomposa ceremonia sobre una tribuna engalanada con gigantescas banderas tricolores entorno a la cual unos 1.300 tamboras tocan "Aux Champs", mientras condecora a varios soldados con la recién creada Legión de Honor. El día 27 partirá hacia Aquisgrán, en una visita oficial a la tumba del Emperador Carlomagno. Los espías británicos creen que pronto ordenará la invasión, necesitando tan sólo de seis horas para cruzar el Canal, urgiendo al Almirantazgo a extremar la vigilancia del estrecho y realizar alguna acción preventiva inmediata. 2 a 3 octubre 1804: Ataque a Boulogne. Una pequeña escuadra al mando del Almirante Lord Keith ataca a las 21:00 horas el puerto fortificado de Boulogne, donde se concentra el grueso de la flotilla y las tropas francesas destinadas a invadir Gran Bretaña. En lugar del clásico cañoneo naval, los británicos emplean varios ingenios diseñados por el inventor Robert Fulton: 18 torpedos-catamarán, varios brulotes explosivos mediante dispositivos de relojería, y un número indeterminado de toneletes-mina flotantes rellenos de pólvora y balas incendiarias. Los vigías franceses avistan a los británicos y despliegan en aguas del puerto una línea de pinazas, pequeñas embarcaciones provistas de cañones ligeros e infantes, mientras abren fuego con sus pesadas baterías de costa para proteger la retirada de las fragatas francesas que estaban ancladas ante el fondeadero. Casi todos los ingenios ingleses fracasan, estallando en medio del mar o siendo capturados por los franceses, hasta que Lord Keith ordena suspender la operación a las 04:00 horas, tras haber hundido solo un barco francés. La prensa británica criticará como poco honorables los inventos de Fulton, quien acusará de incompetencia a los marineros ingleses; la verdad es que Keith no ocultó la operación y los defensores ya estaban prevenidos del ataque, por lo cual nunca existió el factor sorpresa, imprescindible para el éxito de la operación. Los franceses reforzarán las defensas del puerto de Boulogne con cadenas, impidiendo futuros asaltos similares. La acción, aunque infructuosa, influye en la percepción de Napoleón sobre las capacidades de la Royal Navy, deduciendo que la invasión será imposible mientras la Marina Francesa sea incapaz de proteger, no ya los puertos, si no la misma flota de desembarco. Construir una flota de guerra llevaría mucho tiempo y recursos, por lo cual Bonaparte piensa solicitar la ayuda de la Armada Española, que aún en declive sigue siendo poderosa. Con la llegada del invierno, el clima empeorará en el Canal de la Mancha y Bonaparte postergará la invasión hasta la próxima primavera, siempre y cuando España y Francia puedan derrotar antes a Inglaterra en el mar. 5 octubre 1804: Batalla del Cabo de Santa María. España e Inglaterra sostienen un enfrentamiento por el dominio del Atlántico desde hace más de dos siglos. Es una guerra intermitente, intercalada por períodos de tregua; la última contienda comenzó hace ocho años, en 1796, debido al II Tratado de San Ildefonso, renovación del Pacto de Familia, alianza militar entre España y Francia, la otra enemiga tradicional de Inglaterra. La Royal Navy puede fletar más buques y tripulaciones de las que puede permitirse gracias al pillaje, emulando exageradamente la manera en que los ejércitos se mantienen en territorio enemigo: los botines compensan las escasas pagas de marinos y oficiales. Por esta razón, los británicos desean apresar convoyes en los que presuman haya riquezas, más que atacar navíos de guerra. Así, en 1799 cuatro fragatas inglesas asaltaron a dos españolas cargadas con especias, recibiendo los cuatro capitanes británicos más de 40.000 libras cada uno, mientras el millar de marinos tocaron a unas 182 libras, cantidad de dinero equivalente al sueldo de 16 años. Estos repartos de botines son llamados "premios" por las ordenanzas del Almirantazgo, para motivar a oficiales y marinos en el apresamiento de barcos enemigos. Cuando hace unas semanas el comodoro inglés Graham Moore es informado de que una flota española cargada con un tesoro ha zarpado desde Montevideo a Cádiz, no es de extrañar que comience a merodear por el litoral de la costa meridional portuguesa, con la esperanza de asaltar los buques. Aunque España y el Reino Unido no estén oficialmente en estado de guerra, la hostilidad permanece latente. Hacia las 07:00 horas de hoy, la escuadra de 4 fragatas españolas al mando del brigadier Bustamante, armadas con 148 cañones, es avistada en el cabo de Santa María, y acosada por las 4 fragatas británicas de Moore, armadas con 184 cañones. Ambas flotillas navegan en Línea de Batalla durante una hora, y tras la inevitable provocación inglesa, los hispanos abren fuego. Los británicos, con buques más maniobreros, artillados y dotaciones muy entrenadas, hunden enseguida la "Mercedes" al impactar en su Santabárbara. Después abordan las "Medea" y "Santa Clara". La "Fama", logra escapar con graves daños, pero es alcanzada y su capitán rinde la nave hacia las 12:30. Los españoles han tenido unos 270 muertos por solo 2 británicos fallecidos. Los buques capturados serán llevados a Portsmouth. La prensa inglesa critica el incidente, pero Moore ha conseguido lo que todos los oficiales la Royal Navy anhelan. Esta acción de corsario le reporta el buscado ascenso, pasando a comandar un Buque de Línea, pero no la esperada riqueza económica, ya que el Almirantazgo se queda con los 3.000.000 de pesos del botín. Las protestas del embajador español se atienden con una compensación para los supervivientes por valor de unos 230.600 pesos. Los barcos no se devuelven. La situación es juzgada intolerable en España, que hará una declaración de guerra formal contra Inglaterra el próximo 14 de diciembre. Será la última del largo conflicto angloespañol. Gracias a este suceso, Napoleón conseguirá la colaboración de España en su proyecto de invasión a Gran Bretaña, invocando el Tratado de San Ildefonso con el objetivo de que la Marina Francesa y la Armada Española unifiquen sus flotas y busquen una batalla decisiva contra la Royal Navy, derrotándola o alejándola de sus puertos, dejando indefenso el litoral británico del Canal de la Mancha ante un desembarco francés. 23 octubre 1804: Nelson es ascendido a Vicealmirante de la armada británica. 2 diciembre 1804: Napoleón se Corona Emperador. El 18 de mayo, el Cónsul Vitalicio de la República de Francia emite un decreto por el cual se nombra a sí mismo Emperador de Francia, que gobernará como Napoleón I. El 2 de diciembre, en una solemne ceremonia oficiada en la catedral de Notre Dame de París, Napoleón es ungido por el Papa Pío VII, que sin embargo no le ciñe la corona tal y como exigía la tradición carolingia; en su lugar el propio Bonaparte se corona así mismo como Napoleón I, Emperador de Francia, para distanciarse de su precedentes, los reyes borbónicos. A continuación nombra emperatriz a su esposa Josefina. Alrededor de la familia imperial se formará una nueva corte nobiliaria, desprovista de los privilegios que tuvieran los aristócratas franceses anteriores a la Revolución Francesa. Muchos de los admiradores del corso interpretan su coronación como una traición absoluta a los ideales revolucionarios que decía defender; como el célebre músico Beethoven, que borrará el nombre del general de su obra "Sinfonía Heroica". A su vez, el nuevo emperador francés prohibirá La Marsellesa, hasta ahora el himno de la República, por revolucionario. Napoleón está ensoberbecido por su propio poder, y ambiciona abiertamente reorganizar el mapa de Europa, unificando todo el continente bajo su égida, pretendiendo emular la gloria de los Imperios Romano y Carolingio. Sin embargo, como no es aristócrata de nacimiento, los reyes europeos jamás le reconocerán como igual, considerando esta auto-coronación como una vulgar farsa. El I Imperio Francés ( 1804 a 1812 ) 14 diciembre 1804: España declara la guerra a Gran Bretaña. u Volver a Portada de Guerras Napoleónicas Aquí finaliza esta cronología. u Volver a Portada de Guerras Napoleónicas Si eres miembro De Re Militari, También puedes consultar otros Servicios en Línea.